¿Qué es la cata ?

Existen muchas definiciones de catar;  según Jean Ribereau-Gayon Catar es "Probar con atención un producto cuya calidad queremos apreciar y someterlo a nuestros sentidos (en particular al del gusto y al del olfato) Tratar de conocer el producto, buscando sus diferentes cualidades y  defectos".
Jean Ribereau-Gayon fue el maestro de Emile Peynaud (padre de la enología moderna) quien a su vez dijo: “Catar es someter el vino a nuestros sentidos para intentar conocerlo y determinar sus características organolépticas, y finalmente apreciarlos; se distinguen cuatro fases en el acto gustativo: la observación por medio de los sentidos, la descripción de las percepciones, la composición relacionándola con normas conocidas y el juicio justificado”.

Antes de enfrentarnos a un vino debemos tener claro que es lo que vamos a juzgar, que vamos a encontrar en un vino.
Aromas, sabores y sensaciones
Los órganos sensoriales: ojos, nariz y boca transmiten las sensaciones por las vías nerviosas hacia el cerebro, donde se interpretan. Así con los ojos recibimos estímulos visuales que interpretamos como color y aspecto; con la nariz los olfativos directos (olores) y en la boca podemos distinguir: gustativos (sabores), táctiles, químicas y térmicas (astringencia, frescor…) y los olfativos indirectos o aromas de boca.
Así pues podemos observar que en la cata intervienen cuatro sentidos: vista, olfato, gusto y tacto que nos transmiten sensaciones que son las que vamos a evaluar.

Condiciones para la cata

Catavinos

Para realizar correctamente una cata precisamos unas condiciones mínimas tanto materiales como personales
La  cata se debe realizar en una sala bien iluminada, mejor si es luz natural, y libre de olores. Las copas deben ser de cristal transparente, la ideal es el catavinos. También necesitamos una superficie blanca sobre la que mirar el vino.
Además son útiles las fichas de cata donde ir anotando nuestras impresiones.
Para obtener una cata más objetiva es mejor realizarla en grupo, pero no por estar solos os privéis de catar un vino y anotar vuestras impresiones.
Debemos ir aseados pero no perfumados, nuestra colonia puede distorsionar los aromas del vino.
Lo ideal es estar relajados y haber hecho la digestión, mejor si se realiza la cata por la mañana.

En el próximo capítulo como se cata un vino.